Una de las cosas que más me gusta hacer en verano es escaparme a la playa y aprovechar unos días para practicar uno de mis deportes favoritos: el surf. Porque una vez que escuchas la llamada del océano, es imposible no volver al agua para buscar la ola perfecta. El surf tiene algo terapéutico, es capaz de relajarme y a la vez emocionarme como pocas cosas lo consiguen. Y si además logro encontrar el lugar más insólito para practicarlo, la experiencia es inmejorable.
No hay nada como meter la tabla en el gran maletero de mi Outback y empezar a recorrer la costa persiguiendo atardeceres para encontrar ese rincón inesperado donde el último sol de la tarde y las mejores olas te están esperando; esto es algo que puedo hacer gracias a mi Subaru. Su espíritu aventurero me permite llegar a aquellos lugares donde no hay nadie, que solo tú conoces.
Ser un verdadero #SubaruOffRoader es mucho más fácil con él.
Mi rincón es, sin duda alguna, Cádiz: las mejores puestas de sol y mi costa preferida. Llevo años viniendo a este lugar y espero poder seguir viniendo muchos años más. Me encanta pasear, disfrutar del paisaje, relajarme buscando nuevas ideas para mis diseños, aunque a veces me cuesta cuando me doy cuenta de lo triste que es ver como tu lugar favorito comienza a deteriorarse. Esto me lleva a pensar a largo plazo, y en cómo puedo poner mi granito de arena a la hora de revertir los efectos del calentamiento global.
Practico la concienciación medioambiental tanto en mi vida profesional, trabajando con materiales naturales y sostenibles, como en lo personal, cuidando mi entorno de diferentes maneras: dejando la playa como la encontramos (o mejor), yendo con todos los amigos en un solo coche y, sobre todo, que el coche que conduzco ayude a rebajar la contaminación y proteger lo máximo posible el medio ambiente, como lo hace mi Subaru.
Viajar con mi Outback es todo un placer porque puedo llegar a rincones alucinantes, mientras protejo el futuro del planeta ya que suelo utilizar el carburante GLP que es mucho más sostenible que la gasolina. Además, me permite ser independiente, moverme por la ciudad y llegar a los lugares más apartados, gracias a su faceta off road.
Acabo de llegar de Cádiz, pero, ¡ya estoy deseando repostar otra vez para ir a un nuevo destino!
