Una de las cosas que más me gusta hacer en invierno es ir a la nieve a practicar algunos de mis deportes favoritos. Y si lo puedo hacer acompañado de Bruma, pues ¡mucho mejor! No está claro quién contagió el espíritu OffRoader a quién, pero sin duda formamos un equipo perfecto.
Resulta complicado viajar con equipos de nieve, ropa de abrigo, y con una perra tan grande como Bruma, por eso necesitamos un coche con mucho espacio y con las características adecuadas. Y ese es el Subaru Forester, donde cabe todo lo importante y necesario. Por no hablar de la seguridad que te da la tracción total, no solo en la montaña, sino durante todo el viaje, lo que hizo que pudiera centrarme en disfrutar de la carretera y de la compañía de mi mejor amiga.
Con todo listo para iniciar el viaje, solo faltaba decidir el destino. Este año ha sido el turno de Boí Taüll, una estación de esquí maravillosa a más de 2700 metros de altura. Un lugar perfecto para disfrutar de la nieve y de toda la belleza del Pirineo de Lleida. Donde tienes la posibilidad tanto de practicar deporte a máximo nivel como de pasar una jornada tranquila al aire libre.
Cuando viajas con tu perro, hay que tener en cuenta la importancia de encontrar un alojamiento que admita mascotas. En este caso me resultó muy sencillo, nos quedamos en uno de los apartamentos del Hotel Augusta. Una construcción levantada con materiales típicos de alta montaña, como madera, pizarra y piedra con mucho encanto. Quedamos encantados con la comodidad de las habitaciones, el impresionante desayuno con el que coger fuerza para un buen día en la montaña y el SPA donde relajarte a la vuelta.
Lo ideal para un viaje así es ir varias personas, para poder alternar planes con o sin perro. En muchos de estos destinos existen guarderías caninas donde un perrete puede pasar un día de descanso. A no ser que siempre haya alguien haciéndose cargo de él. Todo dependerá del tipo de planes y de las preferencias del grupo.
Nosotros dedicamos uno de los días a disfrutar de la estación, tanto del gran espesor de nieve polvo de sus pistas como de su snowpark. ¡No pudimos pasarlo mejor! Incluso Bruma estuvo a punto de atreverse a subir a la tabla…
Y también dedicamos tiempo a otro tipo de planes más tranquilos, pero igual de apetecibles. Como la impresionante ruta por la montaña con raquetas junto a Bruma que ambos disfrutamos al máximo. Deporte, naturaleza, aire puro y unas vistas impresionantes; y todo ello junto a tu mascota, genial ¿verdad?
Pero esta zona es mucho más que nieve. Cualquiera que venga por aquí no puede dejar de hacer una ruta por algunos de sus pueblos cercanos, lugares de ensueño con construcciones del románico, como sus Iglesias. Además de dar un paseo por el Salencar de Barruera, que cuenta con unos caminos entre el agua con puentes de madera y bancos donde sentarte a disfrutar de las preciosas vistas o ver la fauna de la zona.
En resumen, un lugar genial al que viajar para desconectar. Y una oportunidad perfecta para vivir una pequeña aventura junto a tu perro, familia y amigos. Porque en el Forester cabe todo lo que quieras y mucho más.