Subaru Impreza WRX STi Sedán: Sedán y mucho más

Suspiros, llantos, recriminaciones, protestas, ¡hasta insultos! La ausencia de la versión de tres volumenes en la oferta de la última generación de STi de Subaru ha sido tan dolorosa para sus clientes más incondicionales -y que son muchos, por cierto- como para un santo perder la gracia del altísimo. Afortunadamente, no se sin han sido las misas, o los rezos de aquellos, pero el caso es que, dos años después, la firma japonesa ha rectificado sabiamente y ya tenemos en los escaparates de los concesionarios al flamante Impreza STi Sedán: el ganador de dos mundiales de marcas, de tres de pilotos, uno de los coches de serie que más se parecen a los de carreras.

Subaru, también con sabiduría, intentó que fuese la carrocería compacta la que diese forma al ultimo STi: los sedán de tres volúmenes, en la categoría del Impreza, son coches destinados a un público conservador, algo que no parece casar con la intrepidez de la competición y lo que representa el STi. Pero el tiempo ha demostrado que este coche está por encima de las modas, que sus amantes lo quieren con la forma con la que logró todos los triunfos, y que todo esto es prueba de que, para mucha gente, es mucho más que un coche.

Pero ¡ojo! El nuevo STi Sedán no solo es una nueva carrocería añorada, viene acompañado de diversas evoluciones tanto estéticas como mecánicas que hacen que podamos decir que la versión 2011 da un paso adelante en su desarrollo, no es una mera actualización para salir de nuevo en las revistas.

Por fuera, los paragolpes son de nuevo diseño, más anchos y con mayores tomas de aire, los faros han sido enmarcados en negro, y la parrilla, pintada también en negro, es más grande. A su vez, las llantas disponibles –las de serie y las BBS opcionales– vienen con acabado brillante, y los escapes, dobles, son ahora de mayores dimensiones. Por dentro se añaden, discretamente, nuevos materiales para el recubrimiento del salpicadero y algún retoque en el panel de instrumentos, aunque el resultado no varía demasiado.

Por otro lado, se ha dado una profunda revisión de la amortiguación de cara a fomentar la deportividad. Así, la carrocería baja 5 mm su altura, las suspensiones incrementan su recorrido, aumenta su rigidez el 53% en el eje trasero y el 16% en el delantero –también las estabilizadoras son ahora más rígidas–, e incorpora un interesante nuevo brazo en el eje anterior. Este brazo cuenta con una rótula articulada, que elimina parte de la goma utilizada para fomentar el confort por una pieza metálica, que otorga más control.

¿Quieres saber como han influido todos estos cambios en el temperamento del Impreza? Pues no te pierdas los próximo post, porque Subaru nos ha llevado a un tramo cerrado de asfalto y a otro de tierra para que la experiencia alcanzase su máximo nivel.