Subaru Eyesight, ¿conoces la tercera generación de este dispositivo?

El sistema Subaru EyeSight es una ayuda a la conducción muy útil porque está dedicado a garantizar que no haya peligro de colisión con otro vehículo, además de ayudarnos a mantenernos en el carril, a pesar de las distracciones. Es un sistema en constante evolución que básicamente se cimienta en la mejora de rendimiento de las cámaras que «ven» nuestro entorno.

El Eyesight se introdujo por primera vez en un modelo comercial de Subaru en 2008 (una vez desechados los sistemas basados en radar y láser) para complementar los sistemas de seguridad activos y pasivos de un modelo tan popular como el Outback. Con la ayuda de las cámaras, la seguridad que proporciona el Eyesight no solo es más elevada, sino que además funciona como nosotros: a través de la vista.

Este sistema de seguridad se introdujo en Europa, en la versión de su tercera generación, con la quinta generación del Subaru Outback (de serie en la versión de cambio automático). Con sus dos cámaras a color HD estereoscópicas con sensor de imágenes de semiconductores de metal (CMOS), el sistema puede ver con precisión los objetos que están delante de nosotros.

La característica estéreo permite al sistema detectar y evaluar la distancia a los diferentes objetos (peatones, ciclistas, coches), porque esa visión es tridimensional. Por eso, el sistema actúa de forma similar a la que lo haríamos nosotros, pero con más precisión y velocidad. Además, es capaz de actuar sobre el coche, en concreto sobre el sistema de frenos, el motor y la transmisión, proporcionando tres funciones: frenada de precolisión hasta 50 km/h, control del crucero adaptativo hasta 180 km/h y alerta de cambio de carril.

No solo hablamos de detección de objetos en movimiento, sino que gracias a este sistema de visión artificial, se pueden detectar objetos estáticos como los guardarraíles, y también son detectadas las luces de freno de los vehículos que nos preceden, de manera que se pueda reaccionar con celeridad ante una frenada inusualmente intensa por parte de otro conductor.

Para completar las funciones de seguridad de Eyesight, el sistema jamás tomará el control sin avisar al conductor (mediante estímulos sonoros y visuales), y lo hará si detecta que hay falta de atención, o falta de reacción ante los estímulos externos. Solo en ese caso habrá actuación.

Eyesight está en continua evolución, y esta última generación (por el momento) tiene un campo de visión mejorado en un 40% con respecto a las versiones anteriores. Es un sistema de seguridad muy valorado en las pruebas de los diferentes países, como en el caso de EuroNCAP, el JNCAP japonés, y el IIHS americano, y también está muy valorado por parte de los conductores que lo han probado en sus vehículos.