El mundo está dividido en dos tipos de personas: las que saben si han cerrado el coche o la puerta del garaje y las que siempre dudan sobre si lo han hecho o no y tienen que volver para comprobarlo. Si perteneces a este último grupo, posiblemente encuentres utilidad a lo siguiente: conectar la puerta del garaje a Internet y controlarla a través de tu teléfono.
¿Cuál es la gran ventaja de esta idea de Craftsman? Muy sencillo: los mandos normales del garaje funcionan a través de radiofrecuencia, por lo que tienen un límite de distancia desde el que pueden funcionar. Si cambiamos esa conexión por una conexión a través de Internet, ese inconveniente desaparece, y podemos darle a «cerrar» desde donde sea que estemos.
Para lograr esto, es necesario conectar las puertas del garaje a Internet a través de un cable Ethernet (no, no ofrecen la posibilidad de wifi) y luego descargarse la app gratuita de Craftsman tanto para iPhone como para la mayor parte de dispositivos Android.
Quizá ahora te estés preguntando si este sistema, además de práctico, no es un poco peligroso: ¿qué pasa si cierro o abro la puerta del garaje a distancia y hay alguien por ahí cerca? ¿accidente? No necesariamente: el abridor incorpora unos sensores para detectar si hay alguien en el radio de movimiento de la puerta del garaje y detenerse en cuanto haya contacto. Además, mientras se mueve emitirá sonidos y señales visuales para avisar a la gente que esté cerca.
¿A cuánto sale el juguetito? Como te puedes imaginar, no es especialmente barato: tendrás que pagar 275 dólares por el abridor (o 314 dólares si quieres funciones de backup); además de una tasa anual para utilizar los controles de internet. Eso sí, si eres de los que vuelve a casa con cierta frecuencia porque no cerró la puerta del garaje, seguro que le sacas provecho.
Vía | Kicking Tires
